95% de la deforestación en la Amazonía peruana es causada por la tala y quema de bosques
El Coordinador del Programa Nacional de Conservación de Bosques (PNCB) del Ministerio del Ambiente (MINAM), Gustavo Suárez de Freitas, indicó que cerca del 95% de la deforestación en la Amazonía peruana está asociada a la tala y la quema de bosques para convertir estas tierra con bosques en una tierra que pueda ser utilizada para otros usos como la agricultura o la ganadería.
El funcionario estatal aseguró, durante la entrevista realizada en el espacio Agenda Ambiental, que hay tres motivos fundamentales para entender el porqué de esta situación: (1) la falta de derechos asignados en los territorios, que se traduce en una falta de protección por parte del Estado; (2) la falta de nutrientes del territorio, lo que obliga a los productores a migrar cada cierto tiempo en busca de nuevas tierras productivas; lo que genera (3) pequeñas áreas deforestadas para agricultura, sin embargo estos pequeños focos de deforestación esparcidos afectan más a la Amazonía.
Es por ello que Suárez de Freitas señaló que cualquier propuesta para reducir la deforestación necesita incorporar a los pequeños agricultores y pequeños productores, atraerlos hacia una agricultura que sea sostenible, que sea rentable, que le genere beneficios a ellos y que genere menos impactos ambientales y sobre todo menos deforestación.
“Eso está muy alineado con tendencias globales como la agricultura baja en carbono, la agricultura climáticamente inteligente, hay varios nombres para eso, pero todos tienen que ver con cómo haces producción agrícola sin deforestar y generando captura de carbono a través de sistemas agroforestales, todo lo cual ayuda, además, a mejorar los ingresos de la gente, lo que es muy importante”, señaló el Coordinador del PNCB.
De igual manera, el citado especialista forestal dijo que el PNCB tiene como meta conservar 54 millones de hectáreas de bosques, por lo que clave hacer un balance entre las necesidades de producción agraria y el cuidado de los bosques. “Más tierra tenemos en las áreas que ya están deforestadas sin uso, que las que están bajo uso, entonces la principal política debe ser intensificar el uso agrícola, ocupando las tierras que ahora están degradadas y que hay que recuperar, mejorando la productividad”, indicó el funcionario.
Como ejemplo planteó el caso brasileño, que logró una significativa reducción de la deforestación en la Amazonía. “En cuatro años ellos bajaron en 84% su nivel de deforestación. Ellos redujeron notablemente la deforestación, pero al mismo tiempo el PBI (producto bruto interno) agrícola de la Amazonía creció. Esto quiere decir que enfrentar la deforestación no quiere decir dejar de hacer actividades agropecuarias, quiere decir que tenemos que hacerlas mejor”, afirmó.
Finalmente, indicó que para ello es necesario que el Estado cree condiciones habilitantes como títulos, asistencia técnica, acceso al financiamiento, cadenas de valor, alianzas público-privadas, entre otras, que permitan realizar dichas actividades sin degradar y deforestar la Amazonía. Con ese fin se está elaborando la Estrategia Nacional de Bosques y Cambio Climático, cuyo objetivo es reducir deforestación, concluyó el especialista forestal.
Segunda parte de la entrevista
Escrito por
Organización civil sin fines de lucro, cuyo fin prioritario es lograr una Amazonía con bienestar y equidad socio-ambiental. www.dar.org.pe
Publicado en
Amazonía. Gobernanza. Argumentos y propuestas.